¡Qué mejor lugar para acabar nuestras presentaciones que la ciudad Salamanca! La delgada línea que, en mi caso, separa mi vida personal de la profesional me ha llevado a poner punto y final a las presentaciones de libros solidarios de este año a esta mágica ciudad. Fue precisamente en ella, por aquello de buscar un terreno neutral “ni-pa-ti-ni-pa-mí”, donde nos dimos el “Sí quiero” en su preciosa Catedral Vieja.
Por eso, aprovechando en este caso que “el Tormes pasa por Salamanca”, ayer domingo disfrutamos de esta encantadora ciudad para amanecer en ella ya con la cosecha de libros solidarios en el maletero para ser repartida entre las tres clases de 1º de primaria y las tres de 2º del Colegio Maristas Champagnat. Sus profes decidieron colaborar con un precioso proyecto donde cada gota cuenta (“Gotas de Níger” de UNICEF), pues se trata de llevar agua a lugares del mundo donde el lema “el agua es vida” cobra un sentido tan, tan, tan real como el que su escasez causa un importante porcentaje de las muertes en los niños menores de 5 años.
Hoy por fin les he puesto caras a los seis tutores con los que me he estado “imeleando” durante varios meses para que el día de hoy fuera posible porque, como me decía María, la profe sobre quien ha recaído el peso de centralizar el proyecto,
“algunos estaban empezando a dudar ya de si realmente algún día verían sus cuentos publicados en un libros DE VERDAD”.
Lo cierto es que el proyecto ha tenido una estupenda acogida por parte de los profes y de sus autores y, como en los cuentos, “fueron felices y comieron perdices” 🙂
Y colorín colorado las presentaciones se han acabado, la primera semana de junio realizaremos las donaciones a las 12 causas solidarias con las que este año hemos colaborado gracias a la participación de 14 centros educativos y más de un millar de niñ@s como escritores solidarios.
¡GRACIAS A TOD@S LOS PARTICIPANTE POR HABERLO HECHO POSIBLE!